Publicado el 28-12-2020

Reglamento de casinos en línea de Buenos Aires

La regulación de la industria de juegos de azar en línea en Argentina marcha al galope. En los últimos meses, ha habido avances significativos en materia legal respecto a esta actividad lúdica, sujeta a múltiples controversias debido a algunos vacíos de ley en el sistema jurídico de esta república federal.

No cabe duda de que el aumento de tráfico de apuestas ilegales en Internet, producto del confinamiento por la pandemia del coronavirus, obligó a varias provincias del país a acelerar la legalización de los casinos online; o, al menos, comenzar a tratar el tema en sus propios órganos legislativos.

Durante una sesión ordinaria que sostuvo el pasado septiembre, la Legislatura porteña, por ejemplo, destrabó su reglamento de apuestas en línea al autorizar, con 27 votos positivos, 5 negativos y 26 abstenciones, una resolución de la Lotería de la Ciudad de Buenos Aires (LOTBA).

Esta reforma ↱ introdujo cambios en las reglas y formas de concesión de licencias para casinos online en la capital argentina. Ahora, los operadores de salas de juegos físicos en esta jurisdicción pueden explotar las plataformas digitales para ofrecer sus servicios por Internet. De este modo, se compensará la pérdida de ingresos ocasionada por la cuarentena.

Además, los legisladores sumaron a la reglamentación una cláusula - denominada ficha limpia - que prohíbe al distrito capitalino otorgar licencias a empresarios que estén condenados o inmersos en procesos judiciales por haber incurrido en delitos contra la fe pública, tales como el incumplimiento de deberes; el enriquecimiento ilícito; el tráfico de influencias; el lavado de dinero y el soborno, entre otras infracciones similares.

También plantearon extrapolar esta restricción en el otorgamiento de permisos, aprobada con 37 votos a favor, 4 en contra y 16 abstenciones, a otras faltas (como la estafa y el fraude) cuando el sujeto pasivo sea la administración pública.

Bajo la nueva ley, el Hipódromo de Palmero, cuya compañía propietaria es Hapsa, y el Casino Flotante de Puerto Madero, administrado por Notria, quedan habilitados para participar en el negocio de las apuestas virtuales en la ciudad de Buenos Aires, algo que hasta ahora estaba restringido con el objeto de evitar “prácticas monopolísticas”. Los licenciatarios tendrán que pagar 30.000 dólares para empezar el trámite de la licencia; una cuota anual de 100.000 dólares por cada uno de los cinco años de permiso; el 6% de los ingresos brutos y un 10% de la ganancia neta que sobra una vez descontado el dinero que pagan en premios a los jugadores.

Con esta nueva resolución para los casinos de Buenos Aires, el Gobierno porteño podría recaudar entre 500 y 700 millones de pesos anualmente. Hoy día, la industria del juego en línea en la capital, que incluye las agencias de lotería, reporta ingresos fiscales de alrededor de 5.700 millones de pesos por año.

Por otro lado, desde que la Lotería de Buenos Aires abrió la inscripción para la solicitud de licencias, se han presentado seis actores interesados. Entre ellos, figuran una asociación de capitales ingleses y una reconocida firma de apuestas, según investigaciones llevadas a cabo por periódico argentino Clarín.

Cabe señalar que la Ley de Juegos de Apuestas fue promulgada a finales del 2018. Su objetivo era regular la creciente industria de los casinos en línea, que ya existía en el país, pero de manera clandestina, con sitios web basados en el extranjero, lo cual permitía a los operadores circunnavegar el pago de tributos.

Lucha contra la ludopatía en Buenos Aires  

En paralelo, la Legislatura porteña también sancionó una ley para prevenir la ludopatía en el distrito capitalino y reforzar la protección de los apostadores. Por medio de ella, se busca regular aún más los juegos de azar y evitar la adicción patológica a estos.

Según la norma, todas las salas de casinos deben exhibir un letrero que rece “las apuestas compulsivas son perjudiciales para la salud”, además de mostrar el número telefónico de una línea de crisis y un sitio web de apoyo psicológico. Este rótulo debe ocupar al menos 25% de la entrada principal del establecimiento.

Asimismo, se prohíbe la instalación de cajeros automáticos dentro de las salas de juego o a menos de 200 metros de estas. Las opciones de pago electrónico tampoco son admitidas, mientras que los relojes deben colgar de las paredes de forma destacada. Aparte de eso, los anuncios publicitarios relativos al mundo de las apuestas no pueden estar dirigidos a menores de edad y deben advertir sobre las consecuencias de esta actividad tan controvertida.

Por último, se obliga a los jugadores que apuesten en casinos online a crear un perfil de usuario. Así pues, se controla el acceso a la plataforma, negándole el ingreso a aquellos que reciben subsidios a través de programas sociales o tienen deudas alimenticias. Esta tercera norma recibió 37 votos a favor, 4 negativos y 15 abstenciones.

Regulación de juegos de azar online en el resto de Argentina

La República de Argentina es una democracia representativa de carácter federal, por lo que posee un sistema político dual. Por un lado, está la estructura nacional,  junto con sus tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial); y, por el otro, las 23 estructuras provinciales, más la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, también gobernadas por tres ramas.

En términos legales, esto significa que no existe un solo marco regulatorio para los juegos de azar en línea; cada gobierno provincial fija su propio reglamento. Sin embargo, en la mayoría de las provincias no hay reglas claras para la regulación de esta actividad, o simplemente no existen aún.

Estas lagunas jurídicas, a su vez, dan pie al surgimiento de operadores ilegales que no rinden cuentas a ningún organismo regulador. Como consecuencia, el Estado argentino queda excluido de una participación en este mercado, perdiendo la oportunidad de recibir cuantiosos impuestos.